Friday, July 31, 2009

Hemingway's Paris

"...Paris was a very old city and we were young and nothing was simple there, not even poverty, nor sudden money, nor the moonlight, nor right and wrong nor the breathing of someone who lay beside you in the moonlight"

"There is never any ending to Paris and the memory of each person who has lived in it differs from that of any other."

Ernest Hemingway,
A Moveable Feast

Thursday, July 23, 2009

"They say the seeds of what we will do are in all of us, but it always seemed to me that in those who make jokes in life the seeds are covered with better soil and with a higher grade of manure."

Ernest Hemingway,
A Moveable Feast

Friday, July 17, 2009

De la vida y el amor (Parte 3)

Al interior de las diferencias raciales, socioeconómicas y culturales que dividen al mundo, siempre existirá esa otra división, de la cual nadie habla pero en la cual todos somos partícipes.

Me refiero a la división entre los que están enamorados y los que no lo están, entre los que son amados y los que no lo son, entre los que aman y los que no, y los que creen que aman pero en realidad sólo aman el ideal del amor.

Suena a trabalenguas, pero se resume a la división entre los que gozan del amor y los que no.

Y caemos todos en una serie de razonamientos y rituales sociales, perpetuados por las representaciones culturales del amor y la vida ideal. Las películas tienen finales felices o tristes, dependiendo en el éxito o no del amor, por decir un ejemplo.

En esta esquina, los enamorados:
Desde la simpatía hasta la lástima por aquellos que, a diferencia de nosotros, se encuentran solos. Nos regocijamos en la dicha de haber encontrado el amor, un regocijo que falla en ocultar el alivio que nuestro hallazgo representa. Pues vivir falto de amor, como algunas de las personas que nos rodean, es sin duda una terrible existencia. Procuramos reunirnos con otros enamorados, o bien arrejuntar a nuestros amigos solteros. Si tan sólo todo mundo se amara como nos amamos, el mundo sería un mejor lugar…

En la otra esquina, los despechados/solteros/viudos/cínicos e inadaptados:
Algunos deambulan entre mares de envidia y valles de anhelo, en la búsqueda del príncipe azul, o de aquel beso mágico que los libere de su prisión de cristal. Otros jugaban en el otro equipo, pero sufrieron la deshonra de perder el amor; viven en el recuerdo y buscan desesperadamente dar vuelta al reloj. Ambos viven en la expectativa, se perfuman los viernes y sábados por la noche, regresan a casa horas más tarde y colocan en sus manos vacías el medio litro de helado. Y sin duda, los más desafortunados son aquellos que ni buscan ni han conocido el amor, pues ¿qué sentido podrán encontrar en sus vidas?

¿Quién no ha cuantificado sus relaciones, el tiempo que duraron las mismas, o los años de soltería? ¿En qué momento se convirtió en un referente social estar o no estar con alguien? ¿Es cierto que el amor a una pareja nos define como personas?

¿Existen los finales felices sin amor?

De la vida y el amor (Parte 2)

Dicen que nadie muere por amor, y si lo anterior es cierto, ¿hay alguien que sólo viva por amor?

También dicen que estamos en este mundo para amar y ser amados. Y qué hay del resto del tiempo, ¿es acaso un desperdicio de vida?

Pasé cuatro años y medio de inmensa felicidad, amando y siendo amado. Y ahora que el amor ha abandonado mi vida, noto con sincera curiosidad que todavía tengo pulso. Sigo amando, con el mismo fervor que antes, pero anhelo amar mi vida, no vivir mi amor.

La diferencia es sutil pero fundamental, creo yo. Vivir el amor es una acción temporal, y no es exclusiva, siendo posible vivir el amor, el odio, la tristeza, la fortuna, etc. Por el contrario, amar la vida es procurar nuestra existencia misma. Aquel que mira a la vida con desdén es aquel que renuncia a ella. Renunciar a la vida no requiere un revolver a la sien, hay muertos que caminan entre nosotros.

No podré mentir, tras mi desgracia, seguido pienso en…medidas:
Las tallas de ropa que dejo atrás, el máximo de minutos que puedo permanecer en cama hasta que sea absolutamente necesario pararme, los grados alcohólicos de mis bebidas, los "likes" en Facebook a una selfie que habla más de soledad que de otra cosa.

Patético, ¿no es así?  Se nos olvida fácilmente que el amor sólo puede existir en la vida y que la vida existe independientemente del amor.

En este sentido, llego a la conclusión que amar la vida es aceptar todo lo que ésta conlleva. Amar la vida me permitiría vivir mi dolor, e incluso estar agradecido por él. Amar la vida significaría retirar mi herido corazón del campo de batalla, vivir para luchar otro día, vivir para amar otro día, vivir.

De la vida y el amor (Parte 1)

¿Qué significa decir "eres mi vida"?

La vida es, indudablemente, a cada quien de vivirla. Se trata del bien intangible pero privado por excelencia, pues nadie puede vivirla por uno.

Si alguien es tu vida, ello significaría que su ausencia representa la ausencia de vida, o el fin de la misma. Pareciera que la vida es un bien prestado, que estamos a merced de los acreedores de nuestro amor. Levanten la mano los endrogados, o mejor aún, ¡levanten la mano los grandes detentores de vidas ajenas!

Es una noción absurda, bien entendu. Pero es aún más absurda la innumerable cantidad de individuos que realizan su depósito de amor, cofianza y fe en el banco del prójimo, sólo para descubrir tiempo después que están endrogados. Mientras más deposita uno, más aumenta el riesgo y los intereses sobre la deuda. No resulta sorprendente la penosa reacción de aquellos incrédulos, al ver sus ahorros e inversiones convertirse en deudas ahorcantes.

El sistema financiero del amor es aún más complejo. Los acreedores de vidas pueden fácilmente convertirse en deudores, y viceversa. No hay inversiones seguras, ni bonos a tasas de interés fijas. Ni se diga de recurrir al colchón, ¡no hay lugar más volátil y peligroso para depositar su patrimonio!