Rambling rumblings and some rhyming nonsense... rituales e historias de mi vida adulta.
Saturday, November 7, 2009
Cupid's Dead
Monday, October 19, 2009
Autumn Day in Paris
Tuesday, October 13, 2009
Irreconocible
Hay días en los que no me reconozco, o mejor dicho, no tengo más idea de quién soy o quién se supone que sea. Veo mis manos, mi torso desnudo, incluso mis ojos... y no sé, something is off.
Si contará todas las cosas que han cambiado en los últimos seis meses, es cierto que son muchas y muy grandes. Pero esas diferencias, esos cambios, siempre tienen una fuente material. Algo cambió materialmente, fuere mi situación de vivienda o mi físico.
Pero eso no necesariamente implica un cambio en mi esencia, en lo que me hace yo. ¿O sí?
Siento una intuición muy fuerte, una voz interior gritando en advertencia que mi "estructura espiritual", por así llamarla, está cambiando. Tengo miedo, pues no comprendo cabalmente lo que significa.
Perhaps, the shields have taken one too many hits and the hull has been breached. Am I abandoning ship? Do I need to reroute?
Dicen que lo único constante en la vida es el cambio, y también dicen que una persona nunca cambia. ¿Cómo hacer sentido de tales afirmaciones, tan comunes como contradictorias? Tal vez cambiamos sólo en parte, y de ser así ¿qué partes permanecen sin cambios? ¿Estamos todos condenados a perder la inocencia, la ilusión, la fe en el amor, la fe en el prójimo, la fe en uno mismo?
Y si perdemos todo eso, ¿qué más somos aparte de un saco de piel y huesos? Me pregunto si es posible perder el alma sin tener que vendérsela a ningún diablo.
Cuando me veo en el espejo, cuando permito que mi mirada se fije sobre mis ojos, son como pozos vacíos, carentes de luz. ¿Dónde está mi alma? ¿Quién es ese flaco? ¿DÓNDE ESTOY????
Thursday, October 8, 2009
Carbon Footprints...
Tuesday, September 29, 2009
Pluie je t'en supplie
Monday, September 28, 2009
The Mask
Wednesday, September 23, 2009
Already Gone
Monday, September 21, 2009
Empezando el día... y poniendo la otra mejilla.
Bueno, pues entre hacer el desayuno, planchar mi camisa, prepararme el lunch, rasurarme y bañarme, ya no me dio tiempo de terminar esta entrada. Y lo único en lo que podía pensar eran los minutos antes de la hora zero, la hora en que tengo que salir de casa para llegar a tiempo al trabajo.
La continúo ahora que me encuentro en el trabajo, en mi hora del almuerzo. Estoy comiendo un tofu cake con verduras, y no es por nada, pero está como dirían "scrumptious". Hace rato estuve reflexionando algo, y ya que no tengo otro tema en el momento, pues ¿qué mejor que sacarlo a relucir ahora?
Siempre he sido un firme opositor de la enseñanza cristiana de "poner la otra mejilla". No sólo se me ha hecho aberrante la idea de dejarse lastimar sin poner un alto a la situación, sino que lo he catalogado de cobardía o martirio. No lo digo por ofender a quienes siempre han pensado así, pues cada quien tiene derecho a creer lo que quiera, y sobretodo de vivir su vida según los principios que considere adecuados o necesarios. Simplemente, en mi opinión, "poner la otra mejilla" no corresponde a la idea de luchar en la vida por salir adelante. Vencer la adversidad requiere dar golpes, requiere reaccionar ante los azotes, apretar los dientes, cerrar los puños y abrirse camino. Pues si ponemos siempre la otra mejilla, ¿cuántos golpes podremos aguantar antes de caer?
Hoy en día, comienza a cambiar mi opinión al respecto, a raíz de los últimos meses y el gran cambio que ha tenido lugar en mi vida. He pasado por tantos ratos amargos, verdaderamente oscuros... momentos en los que llorar simplemente no era alivio alguno, momentos tan desolados como la cama en la que despertaba, o la casa vacía a la que llegaba por las noches. Lo peor fueron las decepciones, la desilusión y en particular las humillaciones a las que fui sometido día tras día. Y para alguien que siempre ha luchado por obtener lo que quiere de la vida, fueron momentos en los que, sin más ni menos, puse la otra mejilla.
¡Cuántas cosas pude haber contestado! Dejar que el rencor y la ira se apoderaran de mi cuerpo era una enorme tentación. Defender mi integridad y mi fortaleza era un ardiente deseo que hubiera sido fácil satisfacer. Sabía que con una frase podía destruirlo, castigarlo por el dolor desgarrador que me había infligido. Pero... no lo hice.
Tuve en mi poder tantos medios para lastimarlo a él, para lastimar a su nuevo amor, para arrasar completa y perpetuamente todo lo que fuimos. Pero... no lo hice.
Y cuando vi sin remedio que todo había terminado, que la fortaleza de mi amor y devoción había sido el arma misma con la cual me desmembraron, que la sinceridad, lejos de rendir frutos, había sembrado sal en mi huerta, cuando vi eso, cuando sentí el dolor perpetuo de la amputación... tampoco hice nada.
En cambio, a cada momento, a cada golpe, puse la otra mejilla.
Y es ahora que comprendo, que poner la otra mejilla es posible cuando se ama verdaderamente a la otra persona.
¿Cómo pude pensar en algún momento que poner la otra mejilla era un acto de cobardía? Nada requiere más valor que no levantar la mano contra la gente que amas, a pesar del gran daño que le puedan causar a uno. Amar incondicionalmente no significa amar en cualquier circunstancia y en todo momento; significa amar al alguien a pesar del daño que te puedan hacer, consciente o inconscientemente, significa dejar a un lado el espíritu propio de supervivencia y proteger a la persona que amas de tu reacción, o de sí mismo.
Dejé que tomara sus decisiones, que hiciera (o más bien deshiciera) como quería nuestro amor. Todo lo que me pidió lo hice, y lo hubiera hecho con o sin las amenazas y los chantajes. Lo dejé ir... lo dejé ir a los brazos de alguien más a sabiendas de que ello me calcinaría.
Y no soy un cobarde por haberlo hecho. Requirió de todas mis fuerzas no infligir venganzas en un principio, y después, requirió todo mi esfuerzo no llamarlo para decirle, día con día, lo mucho que lo amaba. Y cuando solicitó mi ayuda, se la di a manos llenas, pues habérsela negado sería nuevamente una forma de venganza que tampoco estuve dispuesto a ejecutar.
En fin... no por haber puesto la otra mejilla soy un santo, ni me considero un ser humano ejemplar. Simplemente he comprendido finalmente lo que eso significa, y admiro mucho a las personas que lo pueden hacer una y otra vez. Esas son personas que verdaderamente aman al prójimo, a todos los prójimos.
¡Se acabó la hora del almuerzo! Hasta pronto... yo.
Sunday, September 20, 2009
Reinvención
Friday, July 31, 2009
Hemingway's Paris
"There is never any ending to Paris and the memory of each person who has lived in it differs from that of any other."
Thursday, July 23, 2009
Friday, July 17, 2009
De la vida y el amor (Parte 3)
Me refiero a la división entre los que están enamorados y los que no lo están, entre los que son amados y los que no lo son, entre los que aman y los que no, y los que creen que aman pero en realidad sólo aman el ideal del amor.
Suena a trabalenguas, pero se resume a la división entre los que gozan del amor y los que no.
Y caemos todos en una serie de razonamientos y rituales sociales, perpetuados por las representaciones culturales del amor y la vida ideal. Las películas tienen finales felices o tristes, dependiendo en el éxito o no del amor, por decir un ejemplo.
En esta esquina, los enamorados:
Desde la simpatía hasta la lástima por aquellos que, a diferencia de nosotros, se encuentran solos. Nos regocijamos en la dicha de haber encontrado el amor, un regocijo que falla en ocultar el alivio que nuestro hallazgo representa. Pues vivir falto de amor, como algunas de las personas que nos rodean, es sin duda una terrible existencia. Procuramos reunirnos con otros enamorados, o bien arrejuntar a nuestros amigos solteros. Si tan sólo todo mundo se amara como nos amamos, el mundo sería un mejor lugar…
En la otra esquina, los despechados/solteros/viudos/cínicos e inadaptados:
Algunos deambulan entre mares de envidia y valles de anhelo, en la búsqueda del príncipe azul, o de aquel beso mágico que los libere de su prisión de cristal. Otros jugaban en el otro equipo, pero sufrieron la deshonra de perder el amor; viven en el recuerdo y buscan desesperadamente dar vuelta al reloj. Ambos viven en la expectativa, se perfuman los viernes y sábados por la noche, regresan a casa horas más tarde y colocan en sus manos vacías el medio litro de helado. Y sin duda, los más desafortunados son aquellos que ni buscan ni han conocido el amor, pues ¿qué sentido podrán encontrar en sus vidas?
¿Quién no ha cuantificado sus relaciones, el tiempo que duraron las mismas, o los años de soltería? ¿En qué momento se convirtió en un referente social estar o no estar con alguien? ¿Es cierto que el amor a una pareja nos define como personas?
¿Existen los finales felices sin amor?
De la vida y el amor (Parte 2)
También dicen que estamos en este mundo para amar y ser amados. Y qué hay del resto del tiempo, ¿es acaso un desperdicio de vida?
Pasé cuatro años y medio de inmensa felicidad, amando y siendo amado. Y ahora que el amor ha abandonado mi vida, noto con sincera curiosidad que todavía tengo pulso. Sigo amando, con el mismo fervor que antes, pero anhelo amar mi vida, no vivir mi amor.
La diferencia es sutil pero fundamental, creo yo. Vivir el amor es una acción temporal, y no es exclusiva, siendo posible vivir el amor, el odio, la tristeza, la fortuna, etc. Por el contrario, amar la vida es procurar nuestra existencia misma. Aquel que mira a la vida con desdén es aquel que renuncia a ella. Renunciar a la vida no requiere un revolver a la sien, hay muertos que caminan entre nosotros.
No podré mentir, tras mi desgracia, seguido pienso en…medidas:
Las tallas de ropa que dejo atrás, el máximo de minutos que puedo permanecer en cama hasta que sea absolutamente necesario pararme, los grados alcohólicos de mis bebidas, los "likes" en Facebook a una selfie que habla más de soledad que de otra cosa.
Patético, ¿no es así? Se nos olvida fácilmente que el amor sólo puede existir en la vida y que la vida existe independientemente del amor.
En este sentido, llego a la conclusión que amar la vida es aceptar todo lo que ésta conlleva. Amar la vida me permitiría vivir mi dolor, e incluso estar agradecido por él. Amar la vida significaría retirar mi herido corazón del campo de batalla, vivir para luchar otro día, vivir para amar otro día, vivir.
De la vida y el amor (Parte 1)
La vida es, indudablemente, a cada quien de vivirla. Se trata del bien intangible pero privado por excelencia, pues nadie puede vivirla por uno.
Si alguien es tu vida, ello significaría que su ausencia representa la ausencia de vida, o el fin de la misma. Pareciera que la vida es un bien prestado, que estamos a merced de los acreedores de nuestro amor. Levanten la mano los endrogados, o mejor aún, ¡levanten la mano los grandes detentores de vidas ajenas!
Es una noción absurda, bien entendu. Pero es aún más absurda la innumerable cantidad de individuos que realizan su depósito de amor, cofianza y fe en el banco del prójimo, sólo para descubrir tiempo después que están endrogados. Mientras más deposita uno, más aumenta el riesgo y los intereses sobre la deuda. No resulta sorprendente la penosa reacción de aquellos incrédulos, al ver sus ahorros e inversiones convertirse en deudas ahorcantes.
El sistema financiero del amor es aún más complejo. Los acreedores de vidas pueden fácilmente convertirse en deudores, y viceversa. No hay inversiones seguras, ni bonos a tasas de interés fijas. Ni se diga de recurrir al colchón, ¡no hay lugar más volátil y peligroso para depositar su patrimonio!
Thursday, June 25, 2009
Les Fausses Promesses
Pourtant tu m'avais dit qu'on serait ensemble,
Pour toujours.
Je ne te laisserai jamais, t'as dit.
Je t'aimerai au-délà de la mort, t'avais promis.
Je tiendrai ta main de vieux, bien ridée, tu m'as juré.
Étaient-elles toutes fausses, tes promesses?
Je suis bouleversé par leur caducité imprevue,
par leur légèreté inattendue.
J'ai tout cru,
Une sûreté reignait mon cœur
Mon âme, elle ausi y croyait.
Là je comprends, ce n'était qu'un fait de foi
Il s'agissait des fausses promesses,
Celles qu'on soupire aux oreilles de nos amants, pleins d'attente.
Combien de fois dit-on "je t'aime" sans le faire exprès?
Combien de serments brisés craquent sous nos pieds,
lorsqu'on se précipite vers les bras d'un nouvel amour?
Pourtant j'ai tout cru, mon amour, je le crois tojours.
Ne m'en veux pas si je tiens à mes promesses.
J'y tiens fort, j'y tiens fidèle.
Elles sont tout ce qui me reste de toi.
Monday, June 22, 2009
Un día más...
Si palidece ante la hermosa fuerza de nuestro amor.
Cuando estamos solos, florece ese mundo mágico,
lleno de luz, sonrisas y caricias sin fin.
Es imposible buscar mi bienestar ahora,
si está irrevocablemente ligado a tu amor.
¿Y si todo mundo se equivoca?
¿Y si todo mundo se da por vencido demasiado pronto?
No quiero escuchar más sus consejos,
No quiero más ser consolado.
Mil vidas te esperaría, mil lágrimas al día.
Por un beso, por una sonrisa sin remordimiento.
No me lastiman tus nuevas amistades,
tus nuevos amores,
tus nuevos vicios.
Me desangra esta impotencia
No haber sido yo quien tomó esa hermosa foto
Donde estás más bello que nunca.
Dios dame fuerza para seguir luchando,
Contra su viento y su marea.
No me dejes de tu mano,
No me quites el aliento,
Dame vida para luchar un día más,
O quítamela ya, y dale ya mi alma,
que siempre ha sido suya.
Thursday, June 18, 2009
Questions
Answers play hide and seek with my heart.
Thrashing about in a pool of versions,
I craft relentlesstly this painful art.
How'd you manage,
how'd you manage,
to cause me so much damage?
To doubt myself, is to doubt our story.
I could continue holding you soflty in your sleep,
Or I could let you bask, in your newfound glory.
What nether thoughts scurry in your mind's deep?
How'd you do,
how'd you do,
to split my heart in two?
What's the deal,
how should I feel,
should I declare our love is dead?
Should I?
Tuesday, June 16, 2009
The Pieces
Pieces of me, pieces of you,
scattered across the cobblestones,
sparkling from every crevice,
dangling from every tree,
shaping every cloud.
I kneel here and there,
pikcing them like shells along the beach,
a fine collection of tender looks,
They're everywhere, the pieces.
I fold them neatly inside my chest,
behind the moisture in my eyes,
inside these expectant lips,
waiting for the day,
you'll come and spring them out.
Monday, June 15, 2009
Unravel (Björk)
My heart comes undone
Slowly unravels
In a ball of yarn
The devil collects it
With a grin
Our love
In a ball of yarn
He'll never return it
So when you come back
We'll have to make new love
Carta a Dios
Te encuentro dónde menos lo espero, y te busco rara vez.
Sin embargo, te he agradecido cuantas bendiciones han cruzado mi camino,
Tal vez no lo suficiente, y por ello te agradezco nuevamente.
La verdad es que ahora, no escucho más que los ruidos de la calle,
Y me pregunto si estás ahí.
Tu voz sonaba tanto más fuerte cuando provenía de él,
Sus palabras de amor eran sin duda tu forma de amarme.
Es un hecho, creí finalmente en tí cuando lo tenía a mi lado,
Tal fortuna no podía ser más que la presencia de algo divino.
Y ahora que no está, ¿a dónde te has ido?
¿Caminas todavía en los rincones de mi nido?
La oscuridad se apodera de mí, un peso indescriptible se deja caer.
Siento desbaratarse mi razón, mis convicciones ya no son más.
Me aferro desesperadamente a él, y mientras más fuerte aprieto más rencor suscito.
Le he fallado, te he fallado, y me fallé a mí mismo.
Tú que eres grande y poderoso, omnipresente y sabio,
Dime cómo llegue aquí.
¿Acaso sentirse tan amado generó soberbia y negligencia?
En qué momento me perdí, lo perdí, te perdí.
¿Por qué nuestra vida se mide por nuestros errores?
Si nacimos para amar y ser amados, ¿por qué no es eso suficiente?
¿Por qué cuando aprendemos nuestra lección, es demasiado tarde?
¿Por qué dejarnos probar la gloria, y observarnos perderla sin decir una sola palabra?
Dios mío que tan poco hablo contigo,
Y sin embargo me conoces tan bien.
Dime dónde encuentro la fortaleza para vivir sin él.
Dime cuándo volveré a estar en tu presencia, si hasta tú te has ido con él.
¿Cómo?
¿Cómo decirte que soy un cuerpo sin alma? Que te llevaste contigo la felicidad y la luz, la risa y el calor, la vida misma...
¿Cómo decirte que mis lágrimas no son más que una fracción de la tristeza que me ha vencido? Que me ha tumbado y sumerge mi fortaleza en charcos negros de impotencia...
¿Cómo decirte que eres lo más bello que jamás he visto? Sabiendo que no encuentras en mí más que fealdad y decepción...
¿Cómo hacer de tu desprecio mis cobijas? Se teje lentamente este traje de entierro, que me aprieta el cuello y no me deja respirar...
¿Cómo hacer de mi tristeza una vida? Dime qué razones encuentro para deambular por la vida sin tí...
¿Cómo sanar tu lastimado corazón? Herido por mis propias manos, torpes e insensibles, aquellas que prometieron colmarte de caricias...
¿Cómo decirte que seré tu amigo? Si eso siempre lo he sido...
¿Cómo hago, cómo hago, cómo hago para vivir sin tí?
Friday, May 15, 2009
¿Recuerdas?
Monday, May 11, 2009
¡Pasen a ver al bufón!
Lo lamento
Wednesday, January 7, 2009
Hugo
Love Me in Daylight
Let the air
fall
j m
u p
And the fire.
S
p
i
l
l
the clamor of your wishes
And hummmmm a psalm for me.
Little by little,
Drinking at instances from your stare,
I get drunk off your sweet, sweet aura.
I'm your medicine
And you are my sickness.
In this jigsaw puzzle,
We are pieces of a perfect match.
Your name tattooed on my forehead,
Your chain embedded in my skin.
Step out of the shadows,
The creaking shadows,
Die in me because we'll live,
Sugar canes for you and me.
Love me in daylight.
My Only Company
The windows are open,
The curtains dancing.
I sway on the hammock,
Cuddled coldly, drowsily.
Looking at my dirty fingernails.
Biting them away, one by one.
A man on the radio is babbling unintelligibly
The signal is full of static.
It's just an old radio with three turning buttons.
Sipping vodka through the curling straw,
Letting it swing up and down the plastic straw.
Fire cascades down my throat,
Splashes inside of me soundlessly.
Hardly glorious.
A crow settles on the verdana's rail
Stirring thick layers of dust.
Its obsidian eye locks with mine
I turn away, the beast squeaks triumphantly.
Sipping a little more,
Smelling imaginary banquets of chicken salad
And gingerbread men,
Listening to "One Love" on the radio,
Biting the last nail off.
Losing myself in the blackness,
The sparrow's blackness.
Smiling cynically for the beast,
And the golden ring in its beak.
The beast's mocking stare,
The only one there.
My only company.
Little Girl
Hugging the light post,
Like a sweet sugar cane.
Swinging herself,
Around and around.
Her skirts fly up
Her skirts fly down.
Her mirthful laughter runs away,
Away in a whirpool of whispering breeze.
Red shoes like Dorothy's,
Tapping away on the sidewalk,
Seem to have a life of their own.
She wears a stole,
A rich, red stole.
It cuddles around her neck,
Flows down her subtle cleavege.
I falter in my step,
Cross the street,
Looking both ways.
Approaching the shining doll,
Her giggles caress my ears.
Pause.
Red-blood lips,
Jet-black eyelids,
Gin perfume.
"Want some company?" she asks,
And tears away my ears.
I heave on the yellow-brick road.
The Monster
still, it strongly snares you.
One single glimpse,
is hard to resist
At first it diverts
But as it enchants
time tends to elapse.
Millions of Medusas
Distributed at every home.
Incredibly,
It's not alive
Different sounds it makes,
brightening your face.
It eats powerful light,
used to get its job done.
Nobody notices the damange
and it is considered a friend.
And after spending,
half your life in front of it,
you decide to do something else;
but it is too late.
Corruption
Sweet Subway
Gray ties all around,
Stained, broken, smeared
or vandalized.
The loud screeching of the train,
as it runs over rusted reels,
bounces violently in her ears.
She walks faster,
as the midnight darkness
seems darker than ever.
And the shadows seem
to creep around mischievously.
The echo of her footsteps
teases her.
She tosses her wavy hair backwards,
trying to grasp a glimpse over her shoulder.
The sound of water dripping nearby
sets a deadly silence.
She holds her breath,
and the water drips,
slowly,
continually.
A crispy touch of a gush of wind
caresses her cheek.
She draws the scarf around her neck,
and stands quietly,
alone,
waiting
for the midnight train.
Lifeless
just like that.
Like a tarnished sock,
smeared with mud
and a pathetic hole
down by the heel.
When the vehicle struck.
Losing its essence,
like a rubber ball
that no longer bounces
to the endless void.
It was instantaneous.
Like the flight of a humming bird,
catching up with the evening breeze.
It will be forgotten, maybe.
Like a Bugs Bunny toy,
stuck in the attic;
home of the creepy spiders
that crawl over its grubby face.
The accident ocurred last night.
The Closet
quickly enough.
Everyday,
sitting in the wheelchair,
dressed in white robes,
expecting someone to walk
through the door
during visiting hours.
She thinks they've locked the door.
Visiting hour's over.
She opens the closet,
and stares at her familiar things.
The picture of a grinning boy
with a fish in his hand.
She reaches for a book with no cover.
Opens the yellow pages
with her purple-dotted hands.
Inside lies a dry rose,
the carmine color barely preserved in
SIXTY years.
An awkward smile
appears across her face,
the prairie smell persists,
She reaches in for a silken tie
and with it,
shakily caresses her wrinkled face,
trying to suck all the warmth left in it,
if there's any...
Ring!
Time for the soup.
She closes her life carefully,
making sure everything's in there,
and leaves,
locking the door,
twice.
Old
so they say.
A prison of fading memories.
Bars of wrinkles hold me down.
The smell of serum burns my nostrils.
The machine hooked to my heart,
beeps slowly,
very slowly.
I'm a child once more,
and it doesn't make me blissful.
The rusty wheelchair screeches,
my wobbly hand barely moves it.
Facing west,
I sit and linger,
for Him to come.
Maybe, tomorrow.
Never, yesterday.
See you,
time for my medicine.
Innocence Flew Out the Window
lie his Lucky Strikes.
The elephant's ears, tattered to shreds,
job of the pocket knife.
The obscene writings
on the Mickey Mouse wallpaper
glare fiercely and affronting.
The alarm clock is set at two in the morning,
who knows what for.
The tiny butts, scattered all over the bed,
still oust their fiendish reek; infiltrating.
A mere tot sleeps on a vinyl couch.
His scribbled hand supports his shaven head.
Something happens in his nightmares;
the scarred and bleeding image of a happy child
comes back.
However, out of grasp.
His bloodshot eyes open simultaneously.
And accustoming to present-day reality,
they close once more.
A quick prayer is all he needs,
to go back to sleep.
The moribund elephant
stares sadly upon the wreck.
Dominant Creatures
A silver trident sinks
into helpless flesh.
Barbaric creatures feast themselves
on the warm insides of their inferiors.
Wiping their dripping mouths
with delicate napkins,
savoring the cooked blood
of those who didn't have a chance.
Once at stakes,
now they're steaks.